Salinas es el único municipio en Puerto Rico que depende exclusivamente de agua subterránea

Se avecina el calor y la falta de precipitaciones de agua que suplen a los distintos embalses de Puerto Rico. Esto ha alarmado al gobierno y a la ciudadanía, por lo que se hace un llamado a manejar de manera juiciosa este recurso tan esencial para la vida.

En el caso del municipio de Salinas la realidad es otra. Salinas es el único municipio cuya fuente principal para recibir el recurso agua no son los embalses, sino el Acuífero del Sur. De este acuífero dependen los más de 31,000 residentes de este municipio.

Según la alcaldesa de Salinas, Karilyn Bonilla Colón, solo se habla del acuífero cuando viene la época de sequía. Bonilla denunció que al momento no se conoce el estado de situación real del acuífero por falta de una investigación que lo documente.

“Durante años, la información que se ha publicado sobre el status del Acuífero del Sur por parte del Departamento de Recursos Naturales y Ambientales (DRNA) y la Autoridad de Acueductos y Alcantarillados (AAA), ha sido confusa y en ocasiones, contradictoria. Desde el año fiscal 2015-2016, el DRNA mantiene una moratoria permanente para la aprobación de proyectos en el Municipio de Salinas por el alegado deterioro del Acuífero del Sur. Esta moratoria permanente no tiene datos científicos que la sustenten, sin embargo, el DRNA utiliza su poder ministerial para negar los endosos en perjuicio del desarrollo económico de Salinas”, expresó Bonilla mediante comunicado de prensa.

La alcaldesa señaló que el gobierno central no da continuidad a lo que “por años se ha propuesto, aprobado y presupuestado”. Además emplazó al nuevo secretario del DRNA, licenciado Rafael A. Machargo Maldonado y a la nueva presidenta de la AAA, Ing. Doriel Pagán Castro, a que tomen acción sobre estos asuntos.

“Les solicito a ambos funcionarios que verifiquen los proyectos de infraestructura ya aprobados que van dirigidos a resolver la situación permanentemente. Por ejemplo, la desconexión de los pozos que usa la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE), de donde extraen un millón de galones de agua al año. Eso está en proceso desde el 2016 y no se conoce el status del mismo.

“Otro proyecto es el de recarga para el cual la Agencia Federal para Manejo de Emergencias (FEMA), aprobó y otorgó cerca de $2.9 millones al DRNA y que la AAA designe fondos para traer agua mediante tuberías”, explicó Bonilla Colón.

Entre las opciones propuestas por la alcaldesa se desataca la realización de un estudio para conocer el perfil del acuífero en la zona de Salinas, que incluya la identificación de las zonas de transición por toda la costa salinense y la topografía desde la montaña, utilizando como base el estudio titulado “Geohydrology of Aguirre and Pozo Hondo Areas Southern PR”, realizado por Robert P. Graves y publicado en 1992.

De igual manera se debe establecer cuál es la extracción segura en épocas normales y en momentos de sequía. La alcaldesa señaló que un estudio realizado en el año 2007, denominado “Groundwater quality survey of the South Coast Aquifer of Puerto Rico”, realizado por José M. Rodríguez and Fernando Gómez-Gómez, “debería revisitarse y comparar resultados para identificar variaciones en los parámetros de calidad de agua”.

Otro de los temas importantes relacionados al Acuífero del Sur es corroborar de manera inmediata cuál es el consumo de agua extraída para uso de la industria agrícola y cómo comparan con los datos ofrecidos por el Servicio Geológico Federal (USGS) en el año 2000. Conviene además verificar el uso que le dan los agricultores al agua del sistema de riego, así como examinar las conexiones al sistema de riego y los pozos en uso en las fincas.

“Lo que requerimos del DRNA y de la AAA, incluyendo los recursos que pueda proveer el USGS, es que finalmente podamos concluir cuál es la condición actual del acuífero y evaluar los distintos escenarios para ahora y el futuro”, añadió la alcaldesa.

Entre sus opciones ya propuestas se destaca la realización de un estudio para conocer el perfil del acuífero en la zona de Salinas, que incluya la identificación de las zonas de transición por toda la costa salinense y la topografía desde la montaña, utilizando como base el estudio titulado “Geohydrology of Aguirre and Pozo Hondo Areas Southern PR” realizado por Robert P. Graves y publicado en 1992.

De igual manera se debe establecer cuál es la extracción segura en épocas normales y en momentos de sequía. La alcaldesa señaló un estudio realizado en el año 2007, denominado “Groundwater quality survey of the South Coast Aquifer of Puerto Rico”, realizado por José M. Rodríguez y Fernando Gómez-Gómez”. Dijo que debería revisitarse y comparar resultados para identificar variaciones en los parámetros de calidad de agua.

Otro de los temas importantes relacionados al Acuífero del Sur es corroborar de manera inmediata cuál es el consumo de agua extraída para uso de la industria agrícola y cómo comparan con los datos ofrecidos por el Servicio Geológico Federal (USGS) en el año 2000. Conviene verificar además el uso que le dan los agricultores al agua del sistema de riego, las conexiones al sistema de riego y los pozos en uso en las fincas.

“Lo que requerimos del DRNA y de la AAA, incluyendo los recursos que pueda proveer el USGS, es que finalmente podamos concluir cuál es la condición actual del acuífero y evaluar los distintos escenarios para ahora y el futuro”, concluyó la alcaldesa.

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