Hacia un Puerto Rico con menos basura

Hacia un Puerto Rico con menos basura

El municipio de Caguas se ahorra de 20,000 a 30,000 dólares mensuales llevando el material vegetativo de la basura a la fábrica de composta en lugar de al vertedero de Humacao como lo hacía anteriormente.

FullSizeRenderTodos amamos a nuestra isla, dotada de inumerables bellezas naturales, y cada día vemos como el desperdicio de recursos y los problemas con el exceso de basura van deteriorando nuestros suelos. En un esfuerzo exitoso por mitigar estas situaciones la compañía Vivo Recycling construyó una fábrica de composta en el municipio de Caguas.

El compostaje es un tema que en Puerto Rico no aun no es tan conocido como debería, pero a la vez las personas que lo conocen hacen lo posible por enseñarlo a todos los que pueden. Cuando se comenzaron proyectos para educar sobre el compostaje, crear una planta municipal en Puerto Rico era solo una idea lejana. Vivo Recycling, industria líder en reciclaje de material vegetativo y orgánico en Puerto Rico, construyó una planta de composta en el municipio de Caguas que comenzó a operar en el 2012.  En la planta se procesa el material vegetativo del municipio para hacer composta y venderla. A esta planta de composta llegan camiones del Municipio Autónomo de Caguas con el material vegetativo de la basura de sus residentes, jardineros, empresas privadas y personas por su propia cuenta que desean disponer de paletas de madera, árboles, ramas, hojas y grama.

El proyecto y los resultados en la comunidad presentan una solución al exceso de basura en la isla.

¿Cómo se hace?

El proceso para convertir el material vegetativo en composta es largo y tarda aproximadamente seis meses. Primero el material se coloca sobre la tierra, se tritura y con palas mecánicas (front loaders) se forman montañas de 10 pies de altura. El material alcanza unas temperaturas de 150 a 160º F. Se dejan las montañas de material para que reciban calor del sol y lluvia, o, en caso de poca lluvia, se les riega suficiente agua por encima para bajar la temperatura y se deja sin mover durante varios días. Luego estas montañas se voltean cuatro veces en seis meses para seguir mezclando el material. Cuando la composta ya está lista, es pasada por una cernidora para quitarle los pedazos de madera grandes que no se compostaron. Finalmente la composta es empacada y vendida.

Photo Gallery

Un abono de beneficios

Los beneficios de una fábrica para procesar material y producir composta son muchos y variados, económicos y ecológicos. El 35 por ciento de los desperdicios sólidos en Puerto Rico se pueden convertir en composta. Simplemente con desviar estos deperdicios, se reduce la cantidad de basura que llega a los vertederos y estos dejan de dar mal olor. Los vertederos son los causantes de la producción de gas metano, uno de los componentes que más afecta la capa de ozono, por lo que se estaría ayudando a evitar el calentamiento global. El material que se convierte en composta es material que estuvo vivo, sea de origen de plantas o animal, por lo tanto es un material que absorbió nutrientes de algún suelo, y al convertirlo en composta y devolverlo al terreno, se le devuelven los nutrientes que una vez estuvieron en ese suelo y se absorbieron a través de las plantas.  Así, se cierra el ciclo natural que hubiese hecho la misma naturaleza.

Además, la composta retiene 100 veces su peso en agua, lo que significa que cuando se echa composta se necesita menos riego para los terrenos. También, las raíces de las plantas crecen 10 veces más con composta, esto las hace tener más resistencia a las enfermedades e insectos, por lo que necesita menos de insecticidas y abonos químicos. “Para Puerto Rico económicamente hace muchos sentido el compostar” dice José Luis Alsina, director de la compañía. Para empezar, por cada empleo que hay en vertedero enterrando basura, el compostaje crea cinco empleos. Se crea una cadena de producción en el país donde ese material se produce y se vende, por lo que en lugar de importar abonos químicos, podríamos convertirnos en exportadores de composta. También beneficia la agricultura, dado a que en estos momentos uno de los costos más altos en la agricultura son los abonos químicos, por lo tanto, si tenemos abono barato aquí, podemos sembrar más y producir más.”

Resultados

Al abrir la fábrica de composta se crearon varios empleos. Actualmente reciben 4,000 a 5,000 yardas de material y producen 200 metros cúbicos de composta mensuales. En un impactante resultado, de esa producción de composta, se venden 500 yardas mensuales a 25 dólares el metro cúbico. Aún más impactante, el municipio de Caguas se ahorra de 20,000 a 30,000 dólares mensuales simplemente llevando el material del que se va a disponer a la fábrica de composta en lugar de al vertedero de Humacao como lo hacía anteriormente.

En las instalaciones de la fábrica, además de la producción y venta de composta se llevan a cabo talleres para escuelas y grupos en donde les enseñan a hacer composta casera y se ofrecen recorridos por la planta. Un pequeño huerto en la entrada de las instalaciones, fue hecho con el propósito de demostrar y motivar a los visitantes a comprar composta y sembrar. El saco de composta tiene un módico precio de 6 dólares.FullSizeRender-1

En la búsqueda de ser la elección

Actualmente la compañía lucha para que se prohíba el que se bote el material orgánico en los vertederos, incluyendo árboles, ramas, hojas, grama y sobras de comida; y que todo ese material vaya por obligación a fábricas de composta. Las compañías ambientalistas buscan que se facilite la permisología para establecer plantas de composta, ya que es difícil hacerlo. Hoy día 24 de 25 vertederos en Puerto Rico no cumplen con la ley, y al no verse controlados en los materiales que desechan ni en las cantidades, a los municipios les resulta más barato disponer en los vertederos. Es por esto que las compañías ambientalistas también buscan que se provean los incentivos económicos para que esos proyectos sean viables, haciendo cumplir a los vertederos cabalmente con las disposiciones de la ley.

Una expansión de proyectos como este y creación de nuevas fábricas, depende del apoyo que se reciba del municipio en cuestión. Municipios que tienen contratos con vertederos, dificultan el proceso, pero se espera que con los resultados de la plantas ya creadas, desviar este material de los vertederos se convierta en una opción viable y preferida en Puerto Rico.monatanas-azules


Sobre Valeria Vázquez Colón
Valeria Vázquez Colón


Únete a nuestra comunidad y apoya a PRTQ

Para continuar haciendo nuestra labor de forma económicamente sustentable, contamos con las contribuciones de nuestra membresía.

Por tan solo $5 al mes, nuestra membresía recibe un email mensual con un resumen de todos los artículos que publicamos ese mes, y tiene la habilidad de dejar comentarios en los artículos en nuestra página web y participar así de la conversación que generen nuestros y nuestras autores y autoras.