El grupo teatral “Y no había luz” ofrecerá en el mes de octubre, nuevos encuentros virtuales para niños de cinco a diez años.

La compañía de teatro reunirá a los niños en encuentros virtuales que buscan exponerlos a la creación artística, juegos teatrales, ejercicios de relajación y movimiento corporal, mientras aprenden a proteger el ambiente. Otoño Zefirante es el nombre de la nueva propuesta artística, la cual invita a nuevas familias a unirse al Club Centinela, abarcador proyecto artístico que fomenta la creatividad y el arte como medio educativo.

“Otoño Zefirante es una alternativa para darle un respiro a las y los niños de la nueva realidad escolar virtual. A pesar de que el encuentro ocurre de manera virtual, la experiencia es una llena de magia, donde cada participante tendrá la oportunidad de expresarse creativamente mientras aprenden conceptos ecológicos y valores sociales.”, explicó Francisco Iglesias, codirector artístico de Y no había Luz.

Con el apoyo del Fondo Flamboyán para las Artes, la Fundación Banco Popular de Puerto Rico, Loisaida Inc. y Acacia Network, los talleres del “Otoño Zefirante” se ofrecerán de manera virtual las semanas del 5 al 9 de octubre, del 19 al 23 de octubre y del 26 al 30 de octubre de 2020. La matrícula está dividida en dos grupos: uno para niños de 5 a 7 años y otros para niños de ocho a 10 años. Los interesados deben comunicarse antes del 30 de septiembre al (787) 638-6593 o al correo electrónico ynohabialuz@gmail.com. También hay disponible una Beca Centinela que pueden solicitar.

“A raíz de la experiencia que vivimos con el Verano, Zefirante nos dimos cuenta que hay que continuar creando este tipo de encuentros para fomentar la importancia del arte en nuestras vidas. Estos encuentros creativos con los niños  nos llenan de ilusión ya que sembramos ideas en las familias de responsabilizarse y tomar acción ante el cambio climático que enfrenta nuestro Planeta Tierra”, señaló Iglesias.

El nombre Otoño Zefirante le da continuidad a su pasado proyecto Verano Zefirante cuyo propósito es crear un vínculo creativo con las estaciones del año y así poder replicar el proyecto por temporadas. “Los zefirantes son unos divertidos personajes que narran nuestro cuento Centinela de Mangó”, indicó Iglesias. El símbolo del zefirante se integra al proyecto del Club Centinela, ya que estas simpáticas criaturas “se dedican a cuidar y a proteger  los recursos naturales y logran mágicamente que la gente se sienta más feliz”.

Por otra parte, la Compañía de Teatro Y No Había Luz en colaboración con el Centro Cultural The Loisaida Center, extiende un puente para trabajar con las familias de habla hispana en la ciudad de Nueva York. “Nos llena de orgullo  poder compartir nuestro Otoño Zefirante con la comunidad de la diáspora puertorriqueña. En cierta medida es nuestra manera de reciprocar y agradecer el papel fundamental que han jugado en nuestra recuperación ante los desastres naturales que hemos enfrentado actualmente.”, expresó Francisco Iglesias.

El Club Centinela propone crear una red mundial para fortalecer los valores sociales y el derecho de los niños de educarse a través de la creatividad, reconocer la importancia de las artes en la vida de los seres humanos y ser parte de la familia de protectores del Planeta Tierra.

Los niños, madres y padres que participen del Otoño Zefirante 2020, se unirán al Club Centinela, que ya cuenta con 56 familias de Puerto Rico, República Dominicana, Chile, México y Boston. Luego durante el año se realizarán actividades mensuales donde otros niños, jóvenes y adultos se puedan unir y así descubrir nuevas formas de convertirnos en Centinelas y protectores de nuestra casa, La Tierra.

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